Este proceso legal le permite a una persona o empresa que no pueda pagar sus deudas obtener un alivio financiero temporal, al acceder a esto, puedes eliminar la obligación legal de pagar la mayoría de tus deudas, detener la ejecución de la hipoteca de una vivienda, recuperar bienes cedidos a los acreedores, detener la retención del sueldo, cobros mayores indebidos, entre otras adversidades. El proceso para declararse en bancarrota también es conocido como solicitud de la quiebra.
Dependiendo del tipo de bancarrota, puedes enrutarte hacia la libertad financiera al liquidar los bienes existenciales o establecer un plan de pago responsable, hacerlo te permite cancelar parte de la deuda sin sufrir inconvenientes financieros a largo plazo. Si quieres saber más de este “borrón y cuenta nueva”, sigue leyendo.
¿Cuándo declararse en bancarrota?
En un escenario típico, un deudor se declara en bancarrota después de haber agotado todas las opciones para mejorar su situación financiera, en este caso, el adeudado hará su declaración cuando se enfrente a posibles demandas, ejecuciones hipotecarias o embargos de salario por parte de un acreedor. Acogerse a una bancarrota detiene a los cobradores y demora el proceso de recuperación de los bienes.
Existen dos tipos de bancarrotas que son los más comunes para las personas:
- Liquidación de bienes no exentos personales (Capítulo 7 – Código de Bancarrota)
- Reorganización de una bancarrota, permitiendo a los deudores conservar sus bienes. En este caso se debe pagar una porción cuantificable de la deuda en un plazo de 3 a 5 años (Capítulo 13 – Código de Bancarrota)
¿Quiénes pueden acceder a una bancarrota?
Se le puede ofrecer bancarrota a personas que devengan dinero, trabajan por su cuenta y son dueños únicos de su negocio. Para reunir los requisitos debes recibir ingresos a intervalos regulares, presentar todas las declaraciones de impuestos requeridas para los periodos tributarios que terminan a los cuatro años de presentar el caso de la bancarrota y cumplir los requisitos especificados en el Código de Bancarrota.
Para aprovechar plenamente el Código de Bancarrota y empezar de nuevo, no puedes seguir adicionando deudas. Si la razón por la que te declaras en bancarrota se debe a una deuda morosa del impuesto federal, tendrías que aumentar la cantidad de los impuestos retenidos o pagos del impuesto estimado. En este caso, si deseas determinar la cantidad correcta que debe ser retenida, puedes ingresar al Estimador de Retención de Impuestos.
Si cargas con deudas grandes, intentar liquidarlas puede resultar frustrante. La bancarrota no es la opción adecuada para todas las personas y solo debes hacer la declaración cuando puedes cambiar tu situación financiera personal para mejorar. Algunas veces, ingresos o propiedades están protegidos frente a los acreedores sin declararse en bancarrota. Así que, en este sentido, no existe razón alguna para hacer la declaración.
En caso de que haya posibilidad de embargo de ingresos o de retención de tus propiedades, la bancarrota puede ser la mejor solución. Ten en cuenta que, pese a que es una segunda oportunidad, también tienen consecuencias negativas. A continuación, te presentamos las recomendaciones por la Comisión Federal de Comercio:
- No te dejes engañar por los anuncios que prometen aliviar las deudas, ya que la mayoría están ofreciendo la presentación de una declaración de bancarrota que quizás no sea favorecedora y dañaría tu crédito, además de incurrir en gastos de abogado.
- Primero contacta a los acreedores para elaborar un plan de pago de deuda para que deposites cierta cantidad al mes. Organizaciones sin ánimo de lucro como National Foundation for Credit Counciling ofrecen este servicio de asesoramiento a un precio módico o totalmente gratuito.
Bancarrota y puntaje de crédito
Ten en cuenta que la bancarrota bajará tu puntaje de crédito y esto puede aparecer en los registros públicos por 10 años en los casos del Código de Bancarrota (Capítulo 7 y Capítulo 13). Así que si quieres mejorar tu puntaje de crédito debes:
- Pagar tus cuentas a tiempo
- Hacer una nueva solicitud de tarjeta de crédito y pagarla a tiempo
- No hacer préstamos si no podrás asumirlos
Ten en cuenta que el Capítulo 7 del Código de Bancarrota asegura que casi todas las deudas de la tarjeta de crédito sean borradas. Esta es la mejor opción para presentar si crees que no puedes pagar tu tarjeta a tiempo o si debes más dinero del que puedes pagar. En este caso, las personas que se declaran en bancarrota presentan este capítulo y tienen su deuda eliminada en unos 90 días, libre de impuestos.
Aplicar a una tarjeta de crédito después de bancarrota
Retomar la vida financiera después de una declaración de bancarrota puede ser difícil, obtener préstamos hipotecarios o automotrices son una opción lejana; sin embargo, si trabajas en mejorar tu crédito, las opciones a futuro mejorarán, ya que es posible hacerlo después de haber salido de una situación de bancarrota.
En este caso, puedes retomar tu vida financiera con las siguientes tarjetas de crédito aseguradas:
Capital One Platinum Secured Credit Card
Esta tarjeta de crédito no tiene cobro por cuota anual o cuota oculta y es la ideal para la creación de crédito fácil, ofrece un depósito de seguridad reembolsable a partir de US$49 para obtener una línea de crédito inicial de US$200. Podrás recuperar tu depósito de seguridad siempre y cuando hagas tus pagos a tiempo; una vez transcurran 6 meses, podrás ser considerado para una línea de crédito más alta. Podrás supervisar la puntuación de tu crédito con CreditWise de forma gratuita además de acceder a la banca en línea con la aplicación móvil de Capital One.
Capital One Quicksilver Secured Cash Rewards Credit Card
Esta tarjeta de crédito no hace cobro de tarifas anuales u ocultas, te permite obtener un reembolso del 1.5% en efectivo por cada compra todos los días. Tiene un depósito de seguridad reembolsable de US$200 que te permitirá obtener una línea de crédito inicial por el mismo valor. El hacer pagos a tiempo te permitirá recuperar tu depósito de seguridad como un crédito de estado de cuenta, además de ser considerado automáticamente para una línea de crédito más alta en 6 meses sin un depósito adicional. Resaltamos el reembolso ilimitado del 5% en hoteles y autos de alquiler reservados mediante Capital One Travel.
OpenSky® Secured Visa® Credit Card
Esta tarjeta es una de las mejores del año para aquellas personas que han atravesado una bancarrota, desean construir su primer crédito o quieren reparar un mal crédito. Destaca que solicita pocos requisitos y; por supuesto, no se necesita contar con un puntaje inicial, pudiendo aplicar a ella aunque se esté atravesando por un mal momento económico. Además, cuenta con un atractivo período de gracia de 25 días, lo cual no está nada mal para construir o reparar un mal crédito. Sus depósitos mínimos de seguridad están entre US$200 y un máximo de US$3,000, dependiendo de su aprobación.